A medida que envejecemos, la piel de alrededor de los ojos y la boca sufre un cierto descolgamiento y flacidez, sobre todo en los pómulos y las mejillas. La piel se ve menos tersa, aparecen zonas más hundidas y se pierde luminosidad.
A veces no le prestamos la atención suficiente a los pómulos y estos son esenciales para la buena estructura del rostro; definen la forma y aportan personalidad y carácter facial. Unos pómulos bien definidos marcan un perfil estilizado, otorgan un aspecto saludable y firme.
Con el aumento de pómulos buscamos obtener un aspecto más rejuvenecido logrando un contorno bien delimitado y proporcionado en cada rostro.
Mediante la aplicación de ácido hialurónico relleno absorbible biocompatible a nuestro cuerpo, buscamos realizar una voluminización Facial que nos ayude a prevenir y corregir los signos del envejecimiento.
Pacientes jóvenes, ya que obtienen una mejora en la fisionomía del semblante. Se crean facciones más marcadas.
Personas de edad media, comprendida entre los treinta y cincuenta años que quieran sostener el aspecto juvenil trabajando las facciones y la supresión de las primeras arrugas ya antes de ser realmente pronunciadas.
Pacientes de edad avanzada, que quieran obtener un efecto lifting que les ayudará a verse más jóvenes.
Es el primer punto de anclaje. Tratando el arco cigomático conseguimos la elevación del pómulo central.
La infiltración de ácido hialurónico en esta zona proyecta los pómulos y corrige el surco órbito-malar.
A medida que envejecemos, la pérdida de volumen en esta área puede crear una depresión hueca que aporta un aspecto de cansancio. La voluminización en esta zona mejora la unión entre el párpado y la mejilla media, consiguiendo así reducir la depresión del lagrimal.
Se realiza un diagnóstico inicial en el que realizamos una valoración del rostro teniendo en cuenta todo el conjunto tridimensional y su relación en cada una de sus zonas, por esto los huesos, concretamente el relieve óseo, adquiere una gran importancia y, concretamente, la zona con más relieve del rostro son los pómulos. El tratamiento es totalmente personalizado garantizando unos resultados excepcionales.
Nuestra técnica es realizada por especialistas con productos de alta calidad, reticulados y más densos con el objetivo de aportar volumen en la zona y proyectar el pómulo hacia delante elevando y realzando las facciones del rostro creando una expresión natural.
Las inyecciones de ácido hialurónico para aumentar pómulos tienen una duración de 1 a 2 años. En los tratamientos con esta substancia está recomendado efectuar una sesión de refuerzo pasados unos meses y observar la evolución el primer año. Tras este período acostumbra a ser recomendable rellenar la una parte de producto que ha sido absorbida por el organismo y de esta manera lograr el volumen deseado.
Imagen: antes y después del tratamiento voluma cheek.
La pérdida de elasticidad de los tejidos, la flacidez y la caída de los rasgos se produce en mujeres y en hombres. Ambos son pacientes aptos para el relleno con ácido hialuronico obteniendo múltiples beneficios que ayudan:
Rejuvenecer: Eliminar las señales del paso del tiempo y recuperar la apariencia de la juventud.
Embellecer: Realzar los rasgos que más nos favorecen.
Prevenir: Evitar el proceso de envejecimiento para no precisar medidas más drásticas en el envejecimiento.
1. Valoración por parte del profesional. Tras el diagnóstico se procede a comenzar con el tratamiento.
2. Registro fotográfico.
3. El especialista verifica que el paciente sea apto para el tratamiento.
4. Se realiza la aplicación del ácido hialurónico.
5. Recomendaciones finales y se realiza cita de control a los 15 días para realizar seguimiento.
No tome medicamentos que tengan efecto anticoagulante como el ácido acetil salicílico (Aspirina, Adiro, etc).
No consumir alimentos o bebidas con efectos vasodilatadores (comidas picantes, bebidas alcohólicas, café...).
Evita el aceite de pescado y la vitamina E, ya que tienden a diluir la sangre. La sangre menos densa hará que el área sea más propensa a hematomas y sangrado.
No se debe frotar, masajear o presionar la zona tratada al menos durante 24 horas para evitar que el producto pueda moverse y modificar la forma dada.
Después del tratamiento no haga ejercicio ni vaya a saunas o baños de vapor hasta trascurridas 24 horas.
Durante los primeros días no dormir boca abajo.
No exponerse al sol y utilizar protector solar.